Que se joda la motivación. Es voluble y poco confiable y, para mí, no vale la pena. Es mejor cultivar disciplina que confiar en la motivación. Oblígate a practicar, a levantarte a hacer eso que quieres aprender. Oblígate a trabajar.
La motivación es fugaz y fácil de tener porque no requiere esfuerzo concentrado para adquirirse. La motivación viene a ti sin tener que perseguirla. La disciplina es confiable.
La motivación es efervescente. Lo que cuesta trabajo no es el cómo seguir motivado, es cómo seguir trabajando sin estarlo.